miércoles, 5 de enero de 2011

Contra el mar

Es como mirar una película y no saber de qué se trata hasta el último minuto, en donde la hora y media pasada toma un sentido menos abstracto que el de simples escenas cinematográficas. Así presiento la vida, que ahora me asfixia y me quita bocanadas de aire. Me entumece y carga en el pecho una piedra muy pesada. Pero yo sé que el final es distinto y que mis ganas de encontrar algún lugar recóndito no se trata de egoísmo. No sé pueden entender las cosas si las separamos. Es por eso que descanso y espero a que el tiempo elabore las consecuencias. Lo importante, es hacerse fuerte y luchar contra el mar para no ahogarse.

1 comentario:

Camila . dijo...

elaborarlas uno mismo no está mal, VOS le das el giro que querés, maru.